El candidato ultraderechista, favorito a ganar la presidencia de la primera economía latinoamericana, Brasil, Jail Messías Bolsonaro, vienen escandalizando el escenario político, no solo brasileño, sino mundial.
Con su estilo desenfadado y directo dispara declaraciones radicales en relación a los derechos de los trabajadores, de la religión y de todo aquello que, en su afiebrada mente retrógrada, no encaja. De las Naciones Unidas, afirma que no sirve para nada, “es un lugar de reunión de comunistas y gente que no tiene el menor compromiso con América del Sur”. Su homofobia no tiene límites: “Si veo a dos hombres besándose en la calle, los voy a golpear” “Sería incapaz de amar a un hijo homosexual” y lo prefiere muerto a que “ aparezca con un bigotudo por ahí”.
Donde más se muestra de cuerpo entero este espíritu tenebroso es en sus convicciones respecto de los afros, la dictadura y la tortura, la delincuencia y la pobreza.┬áCree que fue un “error …torturar y no matar””Pinochet debió haber matado más gente”. “En la época de la dictadura tendrían que haber fusilado a 30.000 corruptos, comenzando por el presidente Fernando Henrique Cardoso”. Este es el plan de acción para luchar contra la delincuencia: “Primero desde un helicóptero se tiran volantes y folletos, dándoles seis horas a los delincuentes para que se entreguen. Cumplido ese plazo, si no se entregan, se ametralla el barrio pobre desde el aire”.
Hasta se atreve a zaherir a la mujer con sus burdas expresiones. Duda de sus capacidades y suelto de huesos afirma que “las mujeres deben ganar menos cuando están embarazadas” y piensa que su última hija, una mujer, ┬ále vino por un momento de “debilidad”.
┬┐Será ┬áeste tenebroso personaje el nuevo presidente de Brasil? “Sus seguidores lo ven como la única vía para terminar con la corrupción o la violencia que acaba con la vida de más de 60 mil personas al año”, acota un comentario periodístico.