RELIGIOSO
Los Servidores de la Iglesia Católica de las Nacionalidades Indígenas del Ecuador (SICNIE), Región Amazónica, mantuvieron una reunión pastoral en la ciudad de Puyo con el objetivo de evaluar el trabajo realizado durante el último periodo y definir los desafíos para el nuevo año pastoral.

Esta pastoral, que cobra especial relevancia por su presencia en comunidades de varios pueblos y nacionalidades ancestrales, busca acompañar a los pueblos indígenas en su camino de fe, identidad cultural y realidad social. Su labor promueve la integración, la solidaridad y el trabajo conjunto entre las diversas comunidades.
Dentro del movimiento destaca el SICNIE-J, un componente juvenil destinado a niños y jóvenes, especialmente aquellos considerados vulnerables ante las nuevas culturas y las transformaciones de la sociedad actual.
La Eucaristía de clausura fue presidida por el Obispo de Puyo, monseñor Rafael Cob García, quien en su homilía felicitó a los misioneros y agentes de pastoral por su compromiso con las comunidades indígenas, “los más necesitados entre los necesitados”, dijo, reconociendo las difíciles circunstancias sociales y políticas que muchas de ellas enfrentan.
El prelado agradeció los días de encuentro y exhortó a los participantes a retornar a sus comunidades “con alegría y esperanza, compartiendo la Palabra de Dios mediante acciones de gratitud, perdón y amor”. Finalmente, los animó a ser solidarios con los más necesitados, recordando el pasaje evangélico de San Lucas 17:11-19, donde Jesús muestra su compasión hacia los leprosos.