MUERTE
La tarde del 1 de diciembre de 2025, un incidente violento registrado dentro de una vivienda del barrio Los Pinos, en la intersección de las calles Los Arrayanes y Olivos, movilizó a unidades policiales, de emergencia y posteriormente a equipos de criminalística. El caso dejó un hombre fallecido y una mujer herida, y actualmente es investigado por la Fiscalía debido a la complejidad de la escena y la falta de una secuencia clara de los hechos.
Cerca de las 17h00, vecinos escucharon los gritos de una mujer que pedía ayuda desde dentro de una casa de dos plantas. De inmediato, varios moradores alertaron al ECU-911 y permanecieron en la calle sin acercarse al domicilio, debido a que se escuchaban golpes y ruidos dentro del inmueble. Unidades policiales fueron las primeras en llegar, seguidas por paramédicos del Ministerio de Salud.
Al ingresar por la puerta principal que se encontraba entreabierta según los agentes, los equipos de emergencia hallaron a una mujer joven con heridas compatibles con cortes causados por arma blanca. Los paramédicos la estabilizaron en el sitio y la trasladaron en ambulancia a una casa de salud. La víctima presentó un cuadro de desorientación y no pudo dar una versión detallada en el momento.
Su testimonio formal sigue pendiente debido a su estado médico. Con la mujer bajo atención, los policías se enfocaron en revisar el resto de la vivienda, ya que vecinos mencionaron que había otra persona dentro. Minutos después, un hombre identificado como Máximo Layedra, de aproximadamente 40 años salió abruptamente del interior desnudo, desorientado y con varias lesiones visibles, entre ellas un corte profundo a la altura del abdomen.
El personal médico intentó atenderlo en la vereda, pero el ciudadano regresó repentinamente al interior de la vivienda. Los uniformados ingresaron nuevamente para asistirlo, pero, pese a los esfuerzos de reanimación, el hombre falleció dentro del inmueble. El levantamiento del cadáver se realizó conforme al protocolo, y el cuerpo fue trasladado al Centro de Investigación de Ciencias Forenses. Fuentes relacionadas con la investigación confirmaron que el fallecido presentaba un corte profundo desde la pelvis hasta el ombligo, así como una herida adicional en la zona del cuello.
Levantaron varios indicios en el interior: manchas hemáticas en pasillos, ropa rasgada, un objeto contundente con restos biológicos y otros elementos cuya naturaleza no ha sido revelada. Además, de forma extraoficial, se conoció que en una pared de la vivienda se hallaron inscripciones hechas aparentemente con sangre. Los mensajes decían: «Te amo E…», «Toda mi familia es culpable», estos textos ya fueron documentados mediante fijación fotográfica y serán sometidos a análisis para determinar si fueron escritos por la víctima o por otra persona. También se compararán las muestras con rastros biológicos recogidos en la escena.
Otro elemento que se suma a la investigación es un video que Máximo Layedra habría publicado en sus redes sociales minutos antes del suceso. El contenido del video, cuya naturaleza no ha sido revelada en su totalidad, ha sido solicitado por la Fiscalía debido a su posible relación con el estado emocional del fallecido previo al incidente. Layedra era conocido en Riobamba por su trabajo como tatuador y por realizar producciones musicales.
