ELECCIONES
Con el objetivo de garantizar un proceso electoral transparente y eficiente, la provincia de Chimborazo avanza en la capacitación de los miembros de las Juntas Receptoras del Voto (JRV) para el Referéndum y Consulta Popular 2025. Más de nueve mil ciudadanos se capacitan como miembros de mesa en los diez cantones de la provincia, en el marco del proceso electoral previsto para el 16 de noviembre.

La Junta Provincial Electoral aprobó la distribución de 150 recintos en los que funcionarán 1.301 juntas, integradas por 9.107 ciudadanos seleccionados por sorteo. El plan de organización electoral establece una cobertura equitativa en los diez cantones chimboracenses. Riobamba contará con 55 recintos; Alausí, 19; Guano, 18; Colta, 15; Guamote, 16; Chunchi, 7; Penipe, 8; Chambo, 4; Pallatanga, 4; y Cumandá, 4. Con esta estructura, el Consejo Nacional Electoral (CNE) asegura las condiciones logísticas necesarias para el desarrollo del proceso del 16 de noviembre.
Las capacitaciones forman parte de la fase preparatoria del calendario electoral y tienen como propósito fortalecer la participación ciudadana y la transparencia del proceso. Desde esta semana, se desarrollan jornadas de formación en los GAD Municipales de Pallatanga, Alausí y Guamote, de lunes a viernes, en horario de 09h00 a 16h00. Estas mismas actividades se replican en los demás cantones de la provincia.
En Riobamba, las capacitaciones se imparten en instituciones de educación superior como la Escuela Superior Politécnica de Chimborazo (ESPOCH), la Universidad Nacional de Chimborazo (sede La Dolorosa) y el Campus Norte vía a Guano. Además, la Delegación Provincial Electoral de Chimborazo, ubicada en la calle Cristóbal Colón y José de Orozco, mantiene atención de lunes a domingo, de 08h00 a 17h30, para facilitar la asistencia de los ciudadanos que trabajan o estudian durante la semana.
Durante las jornadas, los miembros de mesa aprenden sobre las etapas del sufragio, el manejo de materiales electorales, el conteo de votos y la validación de papeletas, además de recibir orientación sobre las medidas de seguridad electoral. Estas prácticas buscan evitar errores durante el escrutinio y reforzar la confianza de la ciudadanía en los resultados.