INSEGURIDAD
La inseguridad que enfrenta el transporte pesado en las carreteras del país volvió a quedar en evidencia tras el secuestro del conductor de un camión en el kilómetro 26 de la vía Durán–Tambo, en el sector de Taura, provincia del Guayas, uno de los tramos más peligrosos según denuncias del gremio.
El hecho ocurrió cuando dos delincuentes, uno de ellos armado, interceptaron el vehículo. En un video que circula en redes sociales se observa cómo los sujetos suben a la cabina del camión, obligan al conductor a salir de su asiento y uno de los sospechosos toma el control del vehículo pesado. Al percatarse de la presencia de una cámara, el delincuente que conducía se cubre el rostro con su camiseta.
Los asaltantes se llevaron la mercadería transportada, mientras que horas después la Policía encontró al chófer maniatado a un costado de la carretera, evidenciando la violencia con la que operan estas bandas delictivas.
Transportistas advierten que, pese a las inversiones en seguridad, la delincuencia continúa superando los controles. “Al promedio del año pagamos unos USD 500.000 en seguridad, porque tenemos monitoreo las 24 horas y personal especializado, pero aun así los delincuentes utilizan inhibidores de señal, se llevan los vehículos y luego estos aparecen en otros lugares”, señaló un conductor afectado.
El gremio de transporte pesado, que agrupa a unos 12.000 transportistas de carga a escala nacional, viene denunciando desde hace más de dos años robos, secuestros y extorsiones en las carreteras, delitos que —según indican— se han incrementado en diciembre debido al mayor movimiento comercial.
De acuerdo con cifras de la Fiscalía, entre enero y septiembre de este año se han registrado 6.774 vehículos robados en el país. Guayaquil y Quito encabezan la lista de ciudades más afectadas, con alrededor de 1.700 casos cada una.
Ante este panorama, Carlos Cueva, presidente de la Federación Nacional de Transporte Pesado (Fenatrape), envió una carta a la ministra de Gobierno, Nataly Morillo, solicitando que se retomen las mesas técnicas de seguridad. Si bien desde julio de 2024 se realizaban reuniones mensuales, este mes no se han concretado.
“Tenemos problemas en El Triunfo, en la vía Balzar, El Empalme y en el anillo vial de Quevedo. Estas son zonas calientes y necesitamos soluciones urgentes”, afirmó Cueva, quien pidió que en estas mesas participen representantes de las provincias más afectadas, como Guayas, Azuay y Chimborazo, además de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas.
El dirigente advirtió que la escalada delictiva pone en riesgo la sostenibilidad del gremio, que enfrenta pérdidas económicas constantes y una creciente sensación de inseguridad en las principales vías del país.
