Por. Eduardo Diaz A
La Justicia en Ecuador, llamó a juicio al ex presidente Lenin Moreno, a su esposa, hija y a varios allegados por los sobornos del caso Sinohydro, precisamente el día que se conmemora “El Día Internacional contra la Corrupción”, que se celebra el 9 de diciembre desde 2004, paradójicamente lo que se busca es precisamente, sensibilizar a gobiernos, instituciones, empresas y sociedad civil, sobre la importancia de la transparencia, la rendición de cuentas y la ética en la gestión pública y privada.
El auto de llamamiento a juicio emitido por la Corte Nacional de Justicia, en contra de Moreno y su círculo familiar, apuntan al presunto delito de cohecho, es decir un delito tipificado en el COIP, contra la eficiencia de la administración pública que determina: “Art. 280.- Cohecho.- Las o los servidores públicos y las personas que actúen en virtud de una potestad estatal en alguna de las instituciones del Estado, que reciban o acepten, por sí o por interpuesta persona, donativo, dádiva, promesa, ventaja, beneficio inmaterial o beneficio económico indebido u otro bien de orden material para sí o un tercero, sea para hacer, omitir, agilitar, retardar o condicionar cuestiones relativas a sus funciones, serán sancionados con pena privativa de libertad de tres a cinco años. Se entenderá como beneficio inmaterial, a todo aquel beneficio o ventaja intangible que, por su naturaleza al no tener un valor económico o patrimonial cuantificable, no es susceptible de valoración alguna”.
¿Que vemos? Que los escándalos de corrupción en Ecuador no paran y a medida que se descubren son más resonantes, esta última acusación afirma que, entre 2009 y 2018, habría sobornos por alrededor de USD 76 millones; y el barullo no termina ahí, esto es el inicio de lo que aún no se ve, pero que esta por devenir, y cierto es que no hay nada encubierto, que no haya de descubrirse; ni oculto, que no haya de saberse, porque después de la oscuridad llega la luz, y cuando llega, llega el fin.
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