PARO
El Gobierno Nacional del Ecuador informó este domingo que no existen condiciones para continuar con el proceso de diálogo político establecido con los sectores del movimiento indígena. La decisión fue comunicada oficialmente por el Ministerio de Gobierno, que argumentó la existencia de “pretensiones de imposición” y cambios unilaterales de representantes en la mesa de negociación.
El pronunciamiento, difundido mediante un comunicado oficial, señala que estas acciones “alteran los términos acordados y vulneran los compromisos construidos con responsabilidad y buena fe”. El Ejecutivo manifestó que, pese a su disposición inicial para el entendimiento, no puede sostener un proceso “cuando las reglas del diálogo son modificadas arbitrariamente”.
En el texto se recalca que el Gobierno actuará “con firmeza y dentro del marco de la ley”, priorizando el respeto a los derechos y libertades de la mayoría de ecuatorianos. Además, se recordó que el objetivo de las conversaciones era alcanzar acuerdos que beneficien a todos los sectores, sin afectar el orden público ni el desarrollo económico del país.
El comunicado oficial detalla que, pese a los compromisos adquiridos, las vías continúan bloqueadas y los manifestantes no se han retirado de los puntos de concentración en distintas provincias.
Según el Ministerio de Gobierno, persisten “acciones violentas y cierres de carreteras” que impiden el normal desenvolvimiento de las actividades económicas y sociales, afectando a productores, transportistas y ciudadanos en general.
“No se ha cumplido lo acordado”, enfatiza el documento, en el que se responsabiliza a los dirigentes de mantener posturas intransigentes que dificultan el avance hacia una solución pacífica y consensuada.
Ante este escenario, el Gobierno anunció la suspensión temporal de los mecanismos de mediación y reiteró su llamado a la ciudadanía a mantener la calma.
“El Ejecutivo reafirma su compromiso con la seguridad ciudadana y el orden público, en estricto apego a la Constitución y las leyes del Ecuador”, se precisa en el comunicado.
El Ministerio de Gobierno subrayó además que no aceptará “presiones ni chantajes políticos” y que cualquier diálogo futuro deberá desarrollarse “en un marco de respeto, legalidad y buena fe”.
